¿Fue un desastre el censo del último domingo? Ni toda la buena voluntad de los ciudadanos ni de los empadronadores lograron salvar las deficiencias de metodología y logística del censo organizado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), que incluyó la violación de una voluntaria a manos de un salvaje. El fracaso de este evento tiene un responsable: Aníbal Sánchez, jefe de la referida entidad pública, que en vista de lo sucedido debería ser despedido. 


[Foto de portada: Andina]