Un grupo de congresistas fujimoristas quiere incorporar en el Código Penal el delito contra la libertad religiosa y de culto. Es llamativo que un proyecto de esta naturaleza sea presentado por Carlos Tubino, uno de los principales injuriadores de Twitter, acostumbrado a llamar 'terrorista' o 'corrupto' a todo aquel que lo critique o simplemente no comparta sus opiniones.
Es un buen momento para terminar de entender que el Perú es un estado laico, no uno confesional. ¿Por qué debería corresponder a los religiosos un estatus especial como el que está promoviendo el congresista Tubino? Para defenderse de las ofensas todos los ciudadanos tenemos en el Código Penal los delitos contra el honor, la difamación, la injuria y la calumnia.
El proyecto es claramente un disparate que parece salido de los años de inquisición o de teocracias como Irán o Arabia Saudí. Una ley inconstitucional que quiere devolvernos al medioevo.